Un estudio de los monos Rhesus reveló que es más frecuente que las hembras alimenten a sus bebés ruidosos si hay otros individuos irritados cerca.
Así como los bebés humanos, los monos Rhesus (Macaca mulatta) se valen del ruido -que como el llanto humano es desgarrador- para llamar la atención de sus madres, particularmente si están hambrientos.
Y -como muchas madres humanas avalarían- si el menor es ignorado, el resultado puede ser una rabieta que irrita al que esté cerca.
Stuart Semple, un primatólogo de la Universidad Roehampton, de Londres, que llevó a cabo la investigación, señala que "los gritos de los monos bebé son agudos, crispantes y desagradables, no sólo para la madre sino también para los otros animales que estén cerca.
"Y notamos que la manera en la que las madres responden a ese llanto depende de quién está cerca en ese momento".
¿Y los humanos también?
Corren más riesgo de ser atacados si el bebé está gritando.Los investigadores descubrieron que las hembras eran dos veces más diligentes si estaban cerca de machos agresivos u otras hembras dominantes que si estaban en compañía de menos dominantes o parientes cercanos.
El estudio también mostró que a pesar de que la incidencia de ataques contra las madres y sus crías es baja, la posibilidad de que ocurrieran aumentaba 30 veces si el cachorro se encontraba agitado.
Semple explica que "las madres parecían no querer sucumbir ante el ruido de sus hijos pero cuando había animales grandes y fuertes alrededor que representaban una amenaza para ellas o sus crías, tenían que ceder".
Los investigadores agregan que aunque no hay estudios directamente comparables con seres humanos, algunos informes anecdóticos indican que entre nosotros también ocurre lo mismo.
Semple le dijo a la BBC que cuando le contaba a padres de niños pequeños lo que habían observado, "lo entienden inmediatamente: han sentido este tipo de presión cuando sus hijos tienen rabietas en público".
La investigación está publicada en la revista Proceedings de la Royal Society B (Actas de la Sociedad Real).
El estudio fue llevado a cabo en Cayo Santiago, una isla cercana a Puerto Rico.
Así como los bebés humanos, los monos Rhesus (Macaca mulatta) se valen del ruido -que como el llanto humano es desgarrador- para llamar la atención de sus madres, particularmente si están hambrientos.
Y -como muchas madres humanas avalarían- si el menor es ignorado, el resultado puede ser una rabieta que irrita al que esté cerca.
Stuart Semple, un primatólogo de la Universidad Roehampton, de Londres, que llevó a cabo la investigación, señala que "los gritos de los monos bebé son agudos, crispantes y desagradables, no sólo para la madre sino también para los otros animales que estén cerca.
"Y notamos que la manera en la que las madres responden a ese llanto depende de quién está cerca en ese momento".
¿Y los humanos también?
Corren más riesgo de ser atacados si el bebé está gritando.Los investigadores descubrieron que las hembras eran dos veces más diligentes si estaban cerca de machos agresivos u otras hembras dominantes que si estaban en compañía de menos dominantes o parientes cercanos.
El estudio también mostró que a pesar de que la incidencia de ataques contra las madres y sus crías es baja, la posibilidad de que ocurrieran aumentaba 30 veces si el cachorro se encontraba agitado.
Semple explica que "las madres parecían no querer sucumbir ante el ruido de sus hijos pero cuando había animales grandes y fuertes alrededor que representaban una amenaza para ellas o sus crías, tenían que ceder".
Los investigadores agregan que aunque no hay estudios directamente comparables con seres humanos, algunos informes anecdóticos indican que entre nosotros también ocurre lo mismo.
Semple le dijo a la BBC que cuando le contaba a padres de niños pequeños lo que habían observado, "lo entienden inmediatamente: han sentido este tipo de presión cuando sus hijos tienen rabietas en público".
La investigación está publicada en la revista Proceedings de la Royal Society B (Actas de la Sociedad Real).
El estudio fue llevado a cabo en Cayo Santiago, una isla cercana a Puerto Rico.
Cuando leo estas investigaciones sobre los animales me maravillo de la sabiduría de la creación y asimismo siento que después de todo los animales y los humanos no somos tan diferentes!
13 comentarios:
A los buenos días. Genial artículo. La verdad es que hay poca diferencia entre los humanos y los animales en todo.
Un abrazo y feliz fin de semana
TAL CUAL¡¡¡¡¡¡¡¡¡ EN ALGUNAS COSAS SOMOS TAN SEMEJANTES¡¡
COMO TAMBIEN TE DIGO......QUE EN MAS DE UNA OCASION, CUANDO ME ENTERO DE QUE UN BEBE FUE A BANDONADO POR SU MADRE , EN LA CALLE, EN UN BASURAL ETC, PIENSO , QUE UN ANIMAL NO ABANDONA A SU CRIA Y AVECES SON ELLOS QUENOS DAN SU EJEMPLO¡¡¡
UN BESITO TIA ELSA, BUEN FINDE
Muy interesante, por desgracia en europa esa sana costumbre, la de no molestar al projimo, se esta perdiendo. A la mayoria de los padres les importa muy poco lo mucho que molestan sus retoños a las personas que tienen a su alrededor aprovechandose tal vez, de que la evolucion nos impide liarnos a golpes con padres e hijos...Seguramente es politicamente incorrecto decir que cuanto mas nos separamos de la sabia naturaleza, del instinto mas primitivo de superviviencia peor nos va. Un besito guapa y disfruta de tu fin de semana.
Bardina: verdad que si? hasta en la foto como está la mamá mona con su cachorro se parecen a posturas humanas.
Silvia: es ahì donde los animales nos superan en lo moral y hasta te diría en lo espiritual, coincido totalmente con vos.
Helena: es asi, a veces parece que los hijos molestan y dejamos que hagan lo que quieran, después cuando pasa algo malo lo lamentamos.
es muy cierto, lo lei tambien en el libro de Carlos Gonzales, "Besame mucho" el llanto de nuestros bebes es un mecanismo de defensa, para que la mama este cerca y los alimente, si un bebe no lloraba en aquellas antiiiiguas epocas, se lo comian los animales salvajes!
besotes
me gusto tu blogg, por lo tanto..vendré otro día
y si habrá que llorar, patalear, emberrinchar, etc,etc
me asusta lo mucho que nos parecemos los monos y los humanos, cuac!
CUÁNTO SE DEBE APRENDER DE LOS ANIMALES!
EL HOMBRE AÚN NO USA SUS DONES COMO DEBE, SI A
SÍ LO HICIERA TENDRÍAMOS UN MUNDO MEJOR.
LUEGO DE UNA AUSENCIA NO DESEADA REGRESO A ESTE ESPACIO, ES POR ELLO QUE LE INVITO A PASAR POR MIS BLOGS Y SI GUSTA RETIRAR LOS REGALOS DEJADOS EN DOS DE ELLOS.
LE DEJO MI CARIÑO MI GRATITUD POR SUS VISITAS ANTERIORES Y MI PAZ MARYCARMEN
WWW.WALKTOHORIZON.BLOGSPOT.COM
Tía Elsa:
Instructivo artículo sobre la cría de monos. Mucha similitud con los seres humanos. El comportamiento animal visto de cerca, suele ser interesante.
Besitos, tía Elsa.
Hola guapa..
Es verdad!!No somos tan distintos como a veces creemos..
Normalmente si estamos fuera de casa y el crio nos monta una rabieta venimos corriendo a apaciguarlo, para evitar molestar lo menos posible..Bueno algunos lo hacen!! Yo he visto a padres dejar que el crio llore y llore y nisiquiera le hacen caso, mientras yo me desespero!!!! Seran que son sordos!! HUff!!..
Bueno guapa. te dejo abrazos.. y gracias por pasarte siempre por mi mundo.
es que los monos no son ningunos gilipollas....
un saludo, muy interesante esta entrada!
hola, es verdad... somos bastante precidos. Aunque la mayoría de las veces los animales son mejores. Mi perra Lola es divina.
bss
Si comparto contigo Tia Elsa que hay muchas similitudes entre los animales y nosotros. Solo que pienso que a veces ellos son mejores, ellos no abandonan, ni matan a sus crias.
Exacto! Esto me recuerda al bebé primate pelirrojo que abandonó su mamá mona de pelo negro. Lo habrás visto por la tele, yo lo vi en yahoo y el pequeño es una MONADA. Y si nos parecemos bastante. Besos
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