jueves, 25 de noviembre de 2010

Declaración de derechos....


Me molestan las declaraciones de derecho que quedan en meras declamaciones sin contenido.
Un sólo niño que este en la calle ya no tiene derecho, a un techo, a educación, a una comida caliente compartida en familia. a la contención familiar.
Una mujer golpeada ya no tiene derecho a su dignidad, al respeto por si misma.
Un aborígen sin su tierra no tiene derecho a su identidad, a su cultura, a su pasado, presente y futuro. Y asi podriamos seguir enunmerando.
Hace pocos días en Formosa, una provincia de la República Argentina se reprimió a aborígenes que cortaban una ruta reclamando sus tierras, de las cuales los van desalojando por la fuerza, quemando sus pobres vivienda, ellos son pobres de toda pobreza, olvidados, menospreciados, sin embargo cuando uno los escucha siente su sabiduría ancestral, su humildad y a la vez el orgullo de un pueblo que no se doblega.
Por todos los sin derecho, ruego por ellos.

Pdta:En esa represión hubo muertos, heridos.

domingo, 7 de noviembre de 2010

Para estar alerta...

Tras dejar sus libros en el sofá ella decidió tomar un bocadillo y meterse online.

Se conectó con su nombre en pantalla:

Dulzura14. Revisó su lista de amigos y vió que Meteoro123 estaba enganchado. Ella le envió un mensaje instantáneo:

Dulzura14: Contra las Avispas del Sagrada Familia. RISA. Sus uniformes son un asco! Parecían abejas. RISA

Dulzura14: Hola. Qué suerte que estás! Pensé que alguien me seguía a casa hoy. Fue raro en serio!

Meteoro123: RISA. Ves mucha TV. Por qué alguien te seguiría? No vives en un barrio seguro?

Dulzura14: Claro que sí. RISA. Creo que me lo imagine porque no vi a nadie cuando revisé.

Meteoro123: A menos que hayas dado tu nombre online. No lo hiciste, verdad?

Dulzura14: Claro que no. No soy estúpida, Ok!.

Meteoro123: Jugaste hockey después del colegio hoy?

Dulzura14: Sí y ganamos!

Meteoro123: Genial! Contra quién?

Meteoro123: Cómo se llama tu equipo?

Dulzura14: Somos los Gatos con Botas. Tenemos garras de tigres en los uniformes. Están buenísimos.

Meteoro123: Juegas adelante?

Dulzura14: No, juego en defensa. Me tengo que ir. Tengo que hacer mi tarea antes de que lleguen mis padres. No quiero que se enojen. Chau!

Meteoro123: Te pesco más tarde. Chau Mientras.......

Meteoro123 fue al menú de miembros y empezó a buscar sobre el perfil de ella. Cuando apareció lo marcó e imprimió. Tomó un bolígrafo y anotó lo que sabía de Dulzura14 hasta ahora.

* Su nombre: Verónica C

* Cumpleaños: Enero 3, 85

* Edad.: 13

* Ciudad donde vive: San Isidro

* Pasatiempos: hockey, coro, patinaje e ir al shopping.
* Aparte de esta información sabía que vivía en San Isidro porque se lo había contado recién. Sabía que estaba sola hasta las 6.30 pm cada tarde hasta que lo padres regresaban del trabajo.

* Sabía que jugaba hockey los jueves de tarde con el equipo del colegio, Los Gatos con Botas. Su número favorito, el 4, estaba impreso en su campera.

* Sabía que estaba en octavo grado en el colegio Faustino Sarmiento. Ella se lo había contado todo en conversaciones online. Ahora tenía suficiente información como para encontrarla. Verónica no contó a sus padres sobre el incidente al regreso del parque. No quería que armaran una escena y que le impidieran volver caminando de los juegos de hockey. Los padres siempre sobreactúan y los suyos eran los peores; le hacía desear no ser hija única.

Quizás si hubiera tenido hermanos sus padres no hubieran sido tan sobreprotectores.

Para el jueves Verónica ya había olvidado que la seguían. Su juego estaba en plena acción cuando de repente sintió que alguien la observaba. Entonces recordó. Miró desde su puesto para ver a un hombre observándola de cerca. Estaba inclinado contra la cerca en la tribuna y sonrió cuando lo vió. No parecía temer y rápidamente disipó el miedo que sintió. Después del juego, él se sentó en una de las gradas mientras ella hablaba con el entrenador. Ella notó su sonrisa otra vez cuando pasó a su lado. El saludó con la cabeza y ella devolvió la sonrisa. El notó su nombre en la parte de atrás de la remera. Sabía que la había encontrado. Silenciosamente caminó a distancia segura tras ella. Eran solo unas cuadras hasta la casa de Verónica, y cuando vio donde vivía volvió pronto al parque a buscar su auto. Ahora tenía que esperar. Decidió comer algo hasta que llegó la hora de ir a casa de Verónica. Fue a un lugar de comida rápida y se sentó hasta la hora de hacer su movida. Verónica estaba en su cuarto, más tarde esa noche, cuando oyó voces en la sala.

"Verónica, ven", llamó su padre.

Sonaba molesto y ella no imaginaba porqué. Entró a la sala y vió al hombre del parque en el sofá.
"Siéntate", comenzó su papá, "este señor nos acaba de contar una historia muy interesante sobre ti".

Verónica se sentó.

Cómo podría él contarles cualquier cosa? Nunca lo había visto antes que hoy!

"Sabes quién soy?" preguntó el hombre.

"No", respondió Verónica.

"Soy policía y tu amigo del chat, Meteoro123".

Verónica quedó petrificada. "Es imposible! Meteoro123 es un chico de mi edad! Tiene 14. Y vive en Córdoba!".

El hombre sonrió. "Sé que te dije todo eso, pero no era verdad. Ves, Verónica, hay gente en internet que se hace pasar por chicos; yo era uno de ellos."

Pero mientras algunos lo hacen para lastimar chicos y hacerles daño, yo soy de un grupo de padres que lo hacen para proteger a los chicos de los depredadores.

Vine a encontrarte para enseñarte cuán peligroso es hablar online. Me contaste suficiente sobre ti como para hacerme fácil encontrarte Diste el nombre de tu colegio, de tu equipo y tu puesto. El número y tu nombre en tu chaqueta hicieron que te ubique en un suspiro.

Verónica estaba helada. "O sea que no vives en Córdoba?". El rió. "No, vivo en Buenos Aires. Te hizo sentir segura el pensar que yo estaba lejos, verdad?"

"Tenía un amigo cuya hija era como tú. Sólo que no tenía tanta suerte."

El tipo la encontró y la asesinó mientras estaba sola en su casa.

Se le enseña a los chicos a no decir a nadie cuando están solos, e igual lo hacen todo el tiempo en internet.

La gente errónea te engaña para sacarte información de aquí y allá online. Antes de que lo sepas les contaste suficiente como para encontrarte sin siquiera darte cuenta. Espero hayas aprendido una lección de esto y que no lo harás otra vez.

Cuenta a otros sobre esto para que también estén seguros. "Lo prometo!".

Esa noche, Verónica y sus padres se arrodillaron juntos y agradecieron a Dios por protegerla de lo que pudo ser una situación trágica.